¡Oh! Amantísima María, madre de Dios y madre nuestra.
Tú que en tu alma glorificada en el Señor fuiste elegida de entre todas las mujeres para convertirte en la madre de nuestro amado Jesús.
Oración de la Magnífica para cuidar de los enfermos. Edición por Creemos.net. Original por suju-foto en Pixabay.
Tú, cuyo espíritu lleno de gozo fue testigo de los dones de Dios por medio del Espíritu Santo.
Vengo a ti tan humilde como tú lo fuiste ante el anuncio de tu buenaventura.
Madre fiel, quien tiene la honra de ser llamada por quienes te veneramos Sierva de Dios.
Así serás llamada eternamente por todas las generaciones que han de venir al mundo.
Escucha a este hijo tuyo que hoy te implora, veas con esos ojos llenos de amor, así como miraste a tu hijo Jesús cuando fue clavado en la cruz.
Mi piadosa María, te pido ruegues por mí ante el Padre y me ayudes a sanar mi cuerpo pues una enfermedad inesperada.
Hoy lo debilita y lo desgarra dejándolo sin fuerzas para cargar mis pesados huesos.
Tú que fuiste bendecida por nuestro Padre celestial y te favoreció con grandes y maravillosas cosas, te imploro, devuelve la salud a mi cuerpo.
Permíteme seguir transitando el camino de la vida y continuar siendo servidor tuyo hasta que el Todopoderoso me llame a su presencia.
Tú, Madre admirable, que fuiste la viva voz de quienes desconocen lo que significa el temor de Dios.
Permíteme recobrar mi salud para ser yo tu nueva voz en el mundo.
Permite que Dios extienda sobre mí el brazo de su poder, y que ni el orgullo ni la soberbia se apodere de mi espíritu en estas horas de padecimiento.
Mi Magníficat María, gracias te doy pues sé que no me dejarás solo y llevarás mi pedido al altísimo.
Así como tú exaltaste su nombre, yo exaltaré el tuyo. Pues confiado estoy en tu amor y en tu bondad, y en ese amor de madre que nunca me abandona. Amén.
¿Qué es la Magníficat?
La Magníficat es un cántico o plegaria católica de tipo litúrgica, que hace referencia a lo acontecimientos ocurridos en la vida de Jesús antes de su nacimiento. Específicamente en el momento en que María acepta la voluntad de Dios y se convierte en la madre del Mesías.
La fe católica rinde homenaje a esta bienaventurada y amada mujer. Quien vivió y sufrió en carne propia los dolores más grandes que una madre pueda experimentar por su hijo. Pero aceptando siempre en su corazón que era la voluntad de Padre Celestial.
Como sabemos, Jesús era portador de un gran poder que venía de Dios. Era capaz de sanar a los enfermos ante los ojos de quienes les seguían y escuchaban su palabra. María, su madre, siempre estuvo presente en cada uno de esos momentos.
Es por ello que hemos querido compartir una hermosa oración de la Magnífica para cuidar de los enfermos. Pues siendo María portadora de una fe inmensurable, les cuidará hasta devolverles la salud por intercesión de su hijo Jesús.
Oración de la serenidad
Esta oración de la Magnífica para cuidar de los enfermos nos permitirá solicitar a nuestra Virgen Madre la serenidad que nuestro espíritu necesita. Del mismo modo, que la fuerza para hacer frente a las enfermedades o dolencias que aquejan nuestro cuerpo. Es una oración que también podemos ofrecer por nuestros seres queridos y otros enfermos.
Para muchos pasar por una enfermedad es una experiencia desagradable que afecta su calidad de vida. Les hace perder la fe y la esperanza en Dios. Sin embargo, para otros es una oportunidad para madurar y fortalecer su fe en nuestro Señor.
María nos ha dado a su hijo para que nos refugiemos en su amor y su misericordia. Y es por medio de la oración de la Magnífica, que tendremos la herramienta perfecta para que abogue por nuestra salud ante Jesucristo.